Un blog sin pretensiones. Si en algún momento toco el corazón, ayudo, hago reflexionar, o simplemente le saco una sonrisa a alguien haciéndole el día más agradable con lo que publico,esa sería mi mayor recompensa.


Google

En la Web
NACIDA EN BARRIO DE ORO

Si te gusta, compártelo.

sábado, mayo 29, 2010

Los bomberos rescatan a un loro que gritaba "ayuda" al quedarse atrapado.


Un loro, llamado Enrico, que se enrolló en un cable cuando iba al bar, empezó a pedir auxilio y la gente, creyendo que se trataba de una persona en dificultades, llamó a los bomberos que lo salvaron, informan este sábado los medios italianos.

El pueblo de Spadola se movilizó para ayudar al loro.
Las tribulaciones de Enrico comenzaron ayer en el pueblo de Spadola en la Sierra Vibonesi (Calabria), donde los habitantes se movilizaron para ayudar al papagayo en apuros.

Según afirman los vecinos, Enrico salió de su casa solo para hacer su acostumbrada visita al bar, donde se entretiene con los clientes y luego regresar a casa de su dueño.

Sin embargo, en esta ocasión se olvidó de que llevaba una cadena en la pata y se enganchó con un cable eléctrico.
Los bomberos que acudieron de inmediato.
En evidente dificultad, Enrico comenzó a gritar "ayuda" con tal perfección que los vecinos creyeron que se trataba de una persona y llamaron al cuerpo de bomberos que acudieron de inmediato.

Después, se descubrió que era Enrico el que estaba en peligro y que, gracias a la intervención de los bomberos de Serra San Bruno, fue puesto a salvo. Una vez seguro con su amo, dijo "ciao, ciao" a los bomberos y socorristas.

Corriendo a apagar la vela...JAJAJAJAJAJA



La Sra. Donovan estaba caminando por la calle O"connell de Dublín cuando se cruzó con el padre Rafferty
El padre le dijo: "Muy buenos días! No es usted la Sra. Donovan a quien casé hace dos años"?
Ella contestó " Efectivamente padre soy yo".
El sacerdote preguntó: "¿Y no han tenido niños aun?"
Ella respondió: "No padre, aun no"
El padre dijo: "Bueno, yo estoy yendo para Roma la semana entrante así que prenderé una vela por usted y su esposo"
Contestó : "Oh padre, muchas gracias" y ambos siguieron su camino
Años más tarde se encontraron nuevamente. El sacerdote preguntó:"Bueno
Sra. Donovan ¿ cómo se encuentra usted ahora?"
Ella contestó: "Muy bien padre"
El padre preguntó: "Por favor dígame, han tenido niños ya?"
Ella respondió: "Oh sí padre, 3 pares de mellizos y 4 criaturas más. En total 10"
El padre dijo: "¡Bendito sea el Señor! ¡Que maravilla! Y adonde está su amante esposo?"
Ella contestó: "¡ Camino a Roma a ver si puede apagar la vela que usted prendió!"

martes, mayo 18, 2010

CARTA DE EX A EX...jajajajajajajaja


QUERIDO EX-ESPOSO:
Te estoy escribiendo esta carta para manifestarte que he decidido dejarte, para bien de los dos.
He sido una buena mujer para ti estos siete años, y sin embargo no puedo mostrar nada bueno que me haya tocado a mí. Estas dos últimas semanas han sido un infierno:
Tu jefe llamó para decirme que habías renunciado al trabajo hoy, y eso fue lo máximo que pude soportar.
La semana pasada, viniste a casa y no me mencionaste nada acerca de mi corte de cabello y el arreglo de mis uñas; cociné tu comida favorita y hasta usé un nuevo negligé.
Llegaste a casa y comiste en dos minutos, y te fuiste directo a dormir después de ver el fútbol.
No me dices más: que me amas, no me tocas ni nada. O me estás engañando con otra o no me amas más.
Cualquiera que sea el caso, me quiero ir, te abandono.

P.D. No trates de buscarme. Tu hermano y yo nos mudamos a vivir juntos a Viña.
Que tengas una buena vida. Tu ex-esposa.

QUERIDA EX-ESPOSA:
Nada me ha causado mayor alegría que recibir tu carta.
Es verdad que tú y yo hemos estado casados 7 años, aunque eso no significa que hayas sido una buena mujer. Todo lo contrario. Yo veo mucho fútbol para tratar de ahogar el aburrimiento que me causan tus constantes quejas y malas actitudes.
Qué malo que no funcionó nuestro matrimonio, porque yo si te amaba.
Yo si noté que te habías cortado tu cabello, y la primera cosa que me vino a la mente fue: ¡¡¡Luce como un hombre!!!, pero mi madre me enseñó que si no puedo decir algo bueno de alguien, es mejor no decir nada.
Cocinaste mi comida favorita, debes haberme confundido con mi hermano, porque yo dejé de comer cerdo hace casi 7 años.
Me fui a dormir cuando te pusiste ese negligé, porque la etiqueta con el precio todavía estaba pegada a la prenda. Recé pidiendo que fuera coincidencia que mi hermano me pidió prestados $200.000 esa misma mañana y la etiqueta de tu negligé marcaba $199.000.
Después de todo esto, como todavía te amaba, sentí que todavía podíamos resolver lo nuestro. Así, que cuando descubrí que me había ganado la lotería de $45.7 millones de pesos, renuncié a mi trabajo para tener todo el tiempo para tí, y además compré dos boletos para irnos a Europa.
Pero cuando llegué a casa, tú te habías marchado. Todo ocurre por una buena razón, creo.
Espero que tengas la vida que siempre deseaste.
Mi abogado dice que por la carta que me dejaste, no recibirás ni un centavo de mí. Así que cuídate mucho.

P.D. No se si alguna vez te comenté esto antes, pero mi hermano, Sergio, cuando nació, se llamaba Sonia.
Confío en que esto no será un problema ya que el injerto le quedó bastante real.

Firmado, Rico y Libre!!!! Tu Ex.

jueves, mayo 13, 2010

ESCRITOR Y GUIONISTA CUBANO ARTURO ARANGO HABLA SOBRE EL FUTURO DE CUBA.

El escritor y guionista cubano Arturo Arango opina sobre la realidad cubana. Es interesante que rastreando la noticia fui a buscar la página de la Unión de Artistas de Cuba (UNEAC) y vi que ha desaparecido de la internet.






Cuba: los responsables del futuro



¿Qué piensan, con qué sueñan los jóvenes que viven en la isla? A tenor de sus expresiones, muchos no quieren que su país pierda su independencia pero lo desean más democrático y menos burocrático

ARTURO ARANGO 13/05/2010
Damas de Blanco, ministros destituidos, huelga de hambre de Guillermo Fariñas, el millón de trabajadores subempleados en el sector estatal... cada noticia que sobre Cuba circula en la prensa internacional, no importa el país o la tendencia, parece estar interrogando a un futuro que una y otra vez escapa a las predicciones. Sin embargo, a pesar de las miles de páginas escritas en los últimos años sobre la realidad política de la isla, ese porvenir se contrae o se expande, se oculta o asoma la cabeza para burlarse de sus perseguidores, de espaldas a cualquier vaticinio.


Tengo la certeza de que ello ocurre porque casi siempre se le busca donde no está, o porque se va formando allí donde apenas se le busca. La vida cotidiana del ciudadano de a pie poco tiene que ver con esos acontecimientos que, en otras latitudes, dibujan un rostro irreal de Cuba (y ese ciudadano común tampoco se relaciona mejor, salvo excepciones, con las informaciones que ocupan la escuálida prensa cubana).
Estoy convencido de que, en el complejo periodo de cambios por el que Cuba atraviesa, se confrontan y articulan muchas más fuerzas de las que suelen considerarse públicamente. Es casi obvio que esas fuerzas pueden concentrarse en dos grandes grupos: los que aspiran a reestablecer el capitalismo y los que preferiríamos reencaminar o reformar el sistema actual. Mucho más difícil es identificar las múltiples tendencias en que cada uno podría subdividirse, y la posición que, eventualmente, ocupan sus actores, dentro y fuera de Cuba. Pero aún más arduo es detectar la manera como se mueven, se transforman.
Tal vez dos de los grandes errores que se cometen al tratar de interpretar la realidad cubana (en verdad, cualquier realidad que se suponga viva) son el de pensar al Gobierno como un monolito que actúa sobre una masa de ciudadanos a los que no nos queda más opción que la obediencia, y el de creer que todo permanece tan inmutable como hacen pensar algunas de aquellas imágenes tergiversadas de las que hablé al inicio.
Aun suponiendo que toda persona con cierto rango de poder político prefiera la vía socialista, las maneras de pensar ese modelo oscilarían entre los que quieren sostener (conscientemente o por pura inercia) un Estado burocrático y centralizado y los que creemos que el socialismo sólo es sostenible si logra ser democrático. En otra zona del espectro, como lo hacen evidente algunas medidas del actual Gobierno, habría un pragmatismo economicista que tiene en su base la modernidad instrumental (versiones cubanizadas tanto de la antigua manera soviética, como del actual modo asiático).
Pero abajo, en la calle, ese ciudadano común que a fin de cuentas podemos ser todos, también piensa, actúa, tiene aspiraciones, necesidades, temores. Y se mueve de lugar, inevitablemente se transforma. Más que en decisiones gubernamentales que pueden acelerar, estimular, paralizar el curso de procesos que a veces parecen haber echado a andar, el futuro de Cuba está tomando forma ahora mismo en las expectativas de ese conjunto humano mucho más heterogéneo aún, más inasible de lo que suele reflejarse. Ese futuro se está constituyendo con los materiales que ofrece hoy mismo la realidad, y de acuerdo con los horizontes que son posibles distinguir desde el aquí y el ahora en que vivimos.
Obviamente, el futuro no nos va a complacer a todos, pero lo deseable sería que satisficiera a la mayoría. Es una verdad de perogrullo afirmar que unas fuerzas terminarán imponiéndose sobre otras, ya sea provisoriamente, y que incluso las ganadoras pudieran ser aquellas a las que les importa un comino que Cuba pierda las cotas de independencia alcanzadas con el precio de tantísimos sacrificios.
Si en algún grupo social ese futuro estaría tomando forma, tiene que ser, necesariamente, entre los jóvenes. A ellos les pertenecen como a nadie los años por venir, aunque no siempre tengan conciencia de tal necesidad. Y también se habla de ellos en un confuso plural que los alcanza a todos de igual forma, como si estuvieran ajenos a esa variedad de tendencias o expectativas que he tratado de describir someramente.
Es verdad que buena parte de los jóvenes cubanos, como los de casi todo el planeta, están ganados por el escepticismo, por el desinterés en las cuestiones políticas. Es cierto también que la principal aspiración de muchísimos de ellos es emigrar, abrirse caminos en otras latitudes, principalmente en países desarrollados, y que esa aspiración es reflejo de un desasimiento, de un dar la espaldas a los destinos de la nación cubana. Es verdad pero no es toda la verdad.
Por deformación profesional, suelo atender lo que escriben, lo que pintan, lo que filman los jóvenes, porque en esas obras, a veces por pura negación, incluso por ausencia, pueden estarse respondiendo las preguntas sobre el futuro que a tantos y de tan distintas maneras nos inquietan.
Me llama la atención, por ejemplo, la reiterada presencia de sujetos marginales en numerosos documentales realizados por jóvenes, y que pueden identificarse con los protagonistas de otras piezas teatrales, lienzos, instalaciones, performances.
Hay, en todas esas obras, la intención innegable de dar testimonio de un estado de cosas que tiene que ver con la crisis económica, con las estrategias de sobrevivencia y hasta con la imposibilidad, en algunos casos, de lograrlo con dignidad. Pero también, en esas miradas, incluso siendo diversas entre sí, hay una elección: la de quienes no desean una sociedad de exclusiones, de marginación, de intolerancia, o, lo que es lo mismo, dominada por desigualdades profundas.
El pasado 1 de mayo, entre la multitud que desfilaba por la Plaza de la Revolución, aparecieron carteles que nada tenían que ver con la propaganda oficial. "Socialismo es democracia" y "Abajo la burocracia", decían dos de esos carteles.
Los portaban los miembros de la Red Observatorio Crítico, conformada por jóvenes investigadores, críticos, profesores, artistas, promotores culturales, activistas comunitarios, comunicadores..., quienes reivindican alternativas culturales liberadoras frente a alienaciones capitalistas, autoritarias y coloniales, al tiempo que reconocen que para ellos es imprescindible el compromiso crítico en la defensa de la revolución cubana, proceso al que pretenden despojar de todo lastre conformista.
Al leer sobre los objetivos de esta agrupación, he recordado una anécdota: a inicios de la década de los noventa del pasado siglo, el entonces ministro de Cultura Armando Hart se reunió con un grupo de quienes eran jóvenes intelectuales cubanos. En un diálogo intenso, sus interlocutores reclamaron a Hart una renovación radical de la revolución. El viejo combatiente respondió: "Ya nosotros hicimos nuestra revolución; hagan ustedes la que les corresponde".
Para que ese futuro en construcción complazca a la mayoría de los cubanos, sería desde ya imprescindible ir avanzando hacia un consenso lo más inclusivo posible. Pero ello podrá realizarse, a mi juicio, si se cumplen algunas condiciones de base.
Entre ellas, mencionaré dos. Una es que desaparecen las presiones externas que, lejos de favorecer, entorpecen, paralizan las transformaciones tan deseadas que deben realizarse en la isla, no sólo porque representan acciones inaceptables de injerencia, sino, sobre todo, porque desconocen los verdaderos intereses de los cubanos.
La segunda: que el Estado cubano pueda establecer un diálogo real, no paternalista, en el que participe la totalidad de los cubanos y en el que los jóvenes puedan ejercer el protagonismo que ellos y nosotros necesitamos.


miércoles, mayo 12, 2010

Un trovador elocuente y ambiguo en sus canciones.


JLEVIN@MIAMIHERALD.COM

PEDRO PORTAL / EL NUEVO HERALD
EL TROVADOR Carlos Varela habla con la prensa a su llegada a Miami.El cantautor cubano Carlos Varela tiene casi el mismo aspecto que cuando vino a Miami en 1998, el primer músico de la isla que visitó esta ciudad durante un deshielo cultural de 18 meses. De baja estatura y grueso, sigue vistiéndose de negro, y, a los 47 años, sigue luciendo una barba de candado y anteojos oscuros.
No obstante, la boina negra característica de Varela cubre ahora una cabeza casi completamente calva. Sus canciones, que en los años `90 daban un poderoso mensaje a una generación de cubanos jóvenes ansiosos de cambio, se han hecho más ambivalentes. Si han conservado la misma resonancia es algo que se pondrá de manifiesto el sábado, en su primer concierto en un local importante del sur de la Florida, el Centro de Artes Escénicas Gusman, donde en el 2004 tuvo que cancelar una presentación por habérsele negado la visa.
"Ya hace 12 años que llevo esperando esta oportunidad'', dijo Varela, los ojos rojos de cansancio, durante una parada la semana pasada en el Aeropuerto Internacional de Miami. "Muchos jóvenes cubanos. . . preguntaron: ¿Cómo es posible que yo venga en busca de la tierra de la libertad, y que ahora no me dejen escuchar a mi artista?' Estas canciones también salen de esas contradicciones''.
El regreso de Varela coincide con la reanudación por parte de la administración de Obama del intercambio cultural con la isla. Esta primavera, el famoso grupo de música bailable Los Van Van tocó en Miami, y el dúo puertorriqueño Calle 13 se presentó en La Habana. Varela visitó Washington en diciembre, y tocó ante los miembros del Congreso, a los que pidió que terminen con el embargo y permitan a los estadounidenses viajar a Cuba.
El 3 de junio, Alicia Alonso, directora del Ballet Nacional de Cuba, aparecerá en una celebración del 70 aniversario del American Ballet Theater en Nueva York, y al día siguiente, Silvio Rodríguez, el cantautor más famoso de Cuba y el más estrechamente asociado con la revolución, deberá actuar en Carnegie Hall.
A pesar de esta nueva apertura, sucesos tales como los ataques a las Damas de Blanco mientras protestaban por el sufrimiento de los presos políticos cubanos han revivido viejas tensiones políticas y suscitado cuestionamientos sobre el impacto del intercambio cultural.
Varela dice que todavía tiene fe en el poder de la música para cambiar a la gente, ya que no a la política.
"La música no puede acabar con una guerra; no puede acabar con un embargo. No puede acabar con una crisis económica; no puede acabar con el odio'', dice. "La música no puede detener el tanque. Pero puede tocar el corazón de la persona que está manejando el tanque''.
"Yo sigo creyendo [en el cambio], porque soy un hombre que tiene fe. Hay otras personas que tienen fe, aunque hay mucha desilusión, y no sólo dentro de Cuba. También hay mucha desilusión fuera de Cuba. Pero la gente no pierde la esperanza de que más tarde o más temprano las cosas tienen que cambiar. Y ojalá. . . que para mejorar''.
Varela, quien fuera un rockero marginalizado y underground cuyas canciones parecen admitir y criticar a menudo problemas de Cuba, se ha convertido en una de las figuras musicales mejor conocidas de la isla.
En la década de 1990, sus canciones --Guillermo Tell, en la que el hijo de Guillermo Tell insiste en que le toca el turno de tirarle a la manzana en la cabeza de su padre (lo que se interpreta generalmente como la generación joven hablando con Fidel Castro y los gobernantes envejecidos de Cuba); Foto de Familia, que describe la dolorosa separación de las familias; Como Los Peces, sobre un país traicionado y dolido que llora por sus hijos ahogados en el mar-- encarnaron la frustración de una generación joven que añoraba el cambio y la conexión con el mundo exterior.
En la última década, la música de Varela se hizo más personal, mientras que él ganaba fama como heredero de Silvio Rodríguez y el trovador Pablo Milanés.
Pero su último disco, No Es El Fin, parece señalar otro cambio. Está lleno de desilusión y cansancio con viejos símbolos y expectativas.
"Yo te di mi ilusión, mi niñez, mi país y mi corazón'', canta en Telón de Fondo. "Yo te di mi pasión y la suerte perdida de una generación''.
En La Comedia Silente, él pide "Yo sólo quiero que me dejes un poquito en paz. . . Igual que toda la gente, unos callan y otros mienten''.
A la manera clásica de Varela, cada canción se puede interpretar de muchas maneras. El productor musical Ned Sublette, una autoridad en música cubana que sacó al aire el álbum de Varela Monedas al Aire en 1993, dice que todo aquel que busque declaraciones políticas directas quedará decepcionado.
"Mas bien que expresar opiniones en sus canciones, Carlos hacía preguntas'', dice Sublette.  "Las personas que atribuyan una interpretación política cruda a lo que él está haciendo no entenderá lo que él hace''.



lunes, mayo 10, 2010

Silvio Milanes y Pablito Rodriguez en Pellizcame que estoy Soñando


Disfruten esto.






Disfruten esta parodia de Carlucho y Javier. Esta gente está acabando...JAJAJAJ

En EE.UU, Silvio cantaría sobre cambios en CUBA




Share/Bookmark